Los videojuegos son nuevamente implicados en el debate sobre el acceso y uso de armas que se reabrió tras el terrible tiroteo en Florida perpetrado hace menos de un mes y que dejó un saldo de 17 personas fallecidas.
Al respecto, representantes de la industria de los videojuegos viajarán a Washington para intentar persuadir a los políticos de que la violencia virtual de muchos juegos no desencadenarán una andanada en el mundo real.
Estas reuniones incluyen una entre el presidente estadounidense Donald Trump y el grupo comercial Entertainment Software Association (ESA), ya que luego de los tiroteos en Florida, el mandatario señaló a los juegos de video como un factor que posiblemente ha contribuido con la violencia en el país, informa AFP.
“Tenemos que ver internet porque muchas cosas malas están sucediendo a los niños chicos y sus mentes pequeñas están en formación. Y también los videojuegos. Estoy escuchando cada vez a más gente decir que el nivel de violencia en los videojuegos está dando forma verdaderamente a los pensamientos de la gente joven”, refirió el líder republicano.
Esta postura fue rechazada por ESA, quienes manifiestan que los juegos “claramente” no son culpables, y que tienen cifras que muestran la inexistente relación entre los juegos y la violencia en la vida real.
“Como todos los estadounidenses, estamos profundamente preocupados por el nivel de violencia provocada con armas en Estados Unidos. Los videojuegos claramente no son el tema: este entretenimiento es distribuido y se consume globalmente, pero Estados Unidos tiene un nivel exponencial de violencia con armas más alto que cualquier otra nación”, refirió la entidad.