“Han disminuido las solicitudes de apoyo para llevar a cabo simulacros en guarderías y empresas, situación que impide a los cuerpos de emergencia medir los tiempos de respuesta y conocer las instalaciones de estos sitios”, declaró el director de Administración de Emergencias, Mario Alberto Elizalde Jiménez.
“Este año se recibió un menor número de invitaciones para participar en los simulacros de las guarderías y empresas, en comparación del año pasado que normalmente el municipio es el que al hacer la revisión del plan interno del programa nos enviaba la invitación de manera directa para participar en estas prácticas preventivas”.
Dijo que participar en un simulacro permite al cuerpo de bomberos y elementos de la Seprocicam medir los tiempos de respuesta ante una emergencia real, también a las estancias infantiles y en su caso a los comercios los deja analizar la respuesta que tendrían en caso de riesgo.
“En una emergencia real el personal de bomberos y un servidor conoce las instalaciones, sabríamos cómo llegar, cómo actuar, cuáles son las áreas de mayor riesgo y estos aspectos agilizan el trabajo, y en una situación donde está en riesgo la vida de menores y de adultos hasta un minuto marca la diferencia”.