Luego de señalar hay un cambio en la perspectiva de atención en materia de vivienda pues una familia no es más feliz si los espacios son más amplios, sino por el acceso que puedan tener a bienes y servicios, Oswaldo Sierra Villajuana, director de la Comisión para el Desarrollo de la Vivienda en Campeche (Codesvi), señaló es un tema que ya se trata con los empresarios, ante la problemática existente sobre la falta de reservas territoriales para construcción de vivienda.
-En el tema de las reservas territoriales lo que hemos estado trabajando con ellos es que hay un cambio en la perspectiva de atención en función de ya no tener grandes extensiones alejadas de los centros de población, sino que sea extensiones de menores dimensiones pero mejores ubicadas, que tengan acceso a infraestructura, a fuentes de transporte y sobre todo que estén cercanas a las fuentes de empleo –indicó.
Indicó la condiciones han cambiado pues hay mucho predio que denominó inter urbano desocupado, es decir, “hay muchas construcciones o fábricas y bodegas que ya han venido en desuso, que ya no se utilizan y que presentan una gran posibilidad de reutilizarse”.
-Hemos trabajado con ellos en este cambio de perspectiva, y tratar de aprovechar de mejor forma el suelo inter urbano y eso les va a llevar incluso a hacer proyectos más viables, hasta más baratos porque ya el suelo tiene infraestructura, ya está servido, no hay que gastar tanto en el suelo, no hay que gastar tanto en los servicios y las infraestructuras –enfatizó.
Sierra Villajuana comentó hay un poco de lentitud en la respuesta que se espera del sector empresarial que tiene que ver con la construcción de vivienda pero confió que en los próximos días pueda haber un repunte en el tema.
Sobre el costo de las superficies para vivienda, señaló que particularmente en la ciudad capital del Estado “ya todo es propiedad privada” y agregó “pero en función de la cantidad de viviendas que puedes sacar en un predio en la modalidad vertical, el precio del suelo, lo hace más barato, y es lo que hemos tratado de hacerles ver”.
En este contexto, sobre las dimensiones de los espacios en una vivienda vertical, señaló una de las principales condiciones en la administración federal anterior, es que se aprobó como mínimo que cada vivienda tuviera como mínimo dos recamaras, y al menos 42 a 45 metros cuadrados de construcción, pues antes eran de 22 metros cuadrados, lo que se conocía como pies de casa.
-Hoy deben tener entre 42 a 44 metros cuadrados, si es suficiente o no va en función de las necesidades de la población, del territorio donde se construya vivienda, hay otras variables a considerar.
-Siempre hemos dicho que las posibilidades para que una familia pueda ir creciendo y desarrollarse sanamente no radica solo en tener una vivienda para toda su vida, una adecuada y eso tiene que ver de acuerdo a las propias condiciones de crecimiento y desarrollo puedan alcanzar, incluso, cambiando dónde viven en función de dónde trabajan, y en función de la cantidad de integrantes que tiene la familia, que sea una vivienda más flexible para que tenga esa posibilidad.
-Una familia no es más feliz por la cantidad de espacio que tiene sino por la cantidad de bienes y servicios a los que pueda acceder desde la propia vivienda. Una vivienda vertical con acceso a servicios, seguramente va a redituar mejor en el bienestar de las familias campechanas -dijo.