Padres de familia del Instituto Mendoza realizan manifestación en contra del Obispo de Campeche, Francisco González González, por la decisión de retirar a los padres salvatorianos responsables de la educación y manejo administrativo del Instituto Mendoza, para imponer a una persona de la escuela, “de dudosa reputación, escándalos de ámbito sexual, de pederasta”.
En conferencia de prensa a la que convocaron en las escaleras de la Iglesia Catedral, mientras en las rejas del parque principal colocaron pendones exigiendo al Obispo los reciba y reconsidere sus decisiones e, incluso, que se vaya, los informantes quienes se negaron a proporcionar sus nombres, aseguraron que su preocupación es el riesgo que puede haber para los educandos de nivel primaria, por considerar ser los más vulnerables de sufrir una agresión.
Aunque dijeron no tener pruebas en contra del sacerdote acusado de pederasta, indicaron que la información que tienen aparece en redes sociales y en los propios medios de comunicación, al tiempo que señalaron que los cambios obedecen a intereses económicos, por el pago de colegiaturas y de inscripciones que reciben, de 2 mil 272 pesos de colegiatura mensual y 4 mil 672 pesos de inscripción a nivel primaria, con una población estudiantil en ese nivel de 700 educandos.
Explicaron que la manifestación se realiza por la negativa de personal de la Diócesis de Campeche a darles una explicación del por qué de todos los cambios en el Instituto Mendoza, sin previo aviso y recodaron que son ellos los que sostienen el plantel con sus pagos y que “pagamos por una educación religiosa salvatoriana, no de otro tipo”.
Luego de asegurar que los salvatorianos llegaron a levantar al Instituto Mendoza pues se encontraba en ruinas, trabajan con mentalidad humilde, honesta y trabajadora y que los resultados se ven en las instalaciones, logros académicos, deportivos y que inculcaron valores a la población juvenil, por lo que consideraron injusto que se pretenda cambiar su mundo sin decir nada antes.
-“Ahora que llega gente externa que se dice seguidor de Dios, que se escuda con su vestimenta y que se dice iluminada por Dios, a sacar a estas personas del Estado de una manera grosera, humillante hacia sus personas, lo cual desde el principio fue una conspiración para apoderarse de las instalaciones y de las ganancias que estas generan y de las instalaciones construidas por los salvatorianos, en estos momentos como es el Campus de Champotón.
-Se mencionó en un principio que era por solicitud de un grupo de maestros y alumnos, acusaban de déspota al padre Sebastián Korzack y que exigían su destitución. El padre Sebastián decide irse. Ahora, cuál es la justificación que dicen tener para destituir de sus cargos al padre Andrés, al padre Jacobo. Qué mentira van a inventar ahora dentro de sus mentes retorcidas para engañar a las personas escudándose de su imagen de Dios – cuestionaron duramente.
Aseguraron que de manera “mañosa” los cambios se hicieron en el periodo vacacional, cuando ya había acabado el periodo para que les devolvieran el monto de las inscripciones, lo que exigieron.
-Ahora bien, nos quieren imponer a una persona dentro de la escuela con rango administrativo y escolar, de dudosa reputación, escándalos de ámbito sexual, siendo más explícito, de pederasta –reiteraron y señalaron que el 70 por ciento de los alumnos son menores de 12 años de edad.
-Se tiene que ir, no lo podemos permitir. Queremos que continúen a cargo del Colegio, los salvatorianos.
Finalmente, señalaron que esperarán sólo esta semana para que el problema se resuelva o de lo contrario continuarán sus manifestaciones e insistieron en que no quieren que la Diócesis intervenga en la educación de los Colegios.