De acuerdo a la base de datos de la Justicia de Minesota, Thomas Lane, uno de los cuatro agentes que detuvieron a George Floyd, tiene antecedentes penales.
En 2001, el policía fue juzgado y hallado culpable por dañar una propiedad y obstruir un proceso legal, en 2004 por conducir a exceso de velocidad, en 2007 por participar en una fiesta ruidosa y entre entre 2015 y 2018 fue declarado culpable de impedir el tráfico con su vehículo y dos veces por aparcar sin pagar.
Además, el formulario muestra el cuestionario que debía responder para ser cadete.
En el escrito, Lane respondió preguntas en torno a sus antecedentes penales en los últimos 10 años, pero las autoridades de Mineápolis no dieron a conocer esta información por considerar que eran privadas.
Y es que mientras su abogado, Earl Gray, indicó que su defendido solo tenía 4 días como agente cuando pasaron los hechos, el expediente precisa que estuvo en el Departamento de la Policía de Mineápolis en febrero del 2019 y que se hizo oficial en diciembre.