En el marco de la sesión ordinaria del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), los partidos políticos y las y los consejeros electorales fijaron su postura respecto a la autonomía de la autoridad electoral de cara a la aprobación de su presupuesto para 2020, en la Cámara de Diputados.
Ante la solicitud de las representaciones de los partidos Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática y Movimiento Ciudadano, se incluyó en los asuntos generales de la sesión celebrada este día, un punto sobre la autonomía del Instituto y su presupuesto.
En los próximos días las y los diputados discutirán y aprobarán el Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio 2020. El INE ha solicitado 12,493 millones 356 mil 325 pesos, lo que representa que, de cada 100 pesos del total de los egresos de la Federación, 21 centavos sean para el organismo electoral.
Camerino Márquez, representante del PRD ante el Consejo General del INE, recordó que después de varias reformas electorales México logró dejar atrás el régimen de partido único de Estado, hegemónico, que controlaba las elecciones a través de un órgano electoral subordinado al Poder Ejecutivo.
“Esos principios rectores en la vida política electoral de este país, hoy están en riesgo, porque no puede haber autonomía política de un órgano electoral si no hay autonomía financiera”, afirmó al exhortar a todos los actores políticos a defender la autonomía de órganos como el Instituto Nacional Electoral.
Por su parte, el representante de Movimiento Ciudadano, Juan Miguel Castro, consideró que no puede existir un Instituto Nacional Electoral si no tiene autonomía con respecto a cualquier otra entidad del Estado mexicano, la cual es un mandato de la Constitución.
“Cualquier intento legal o pragmático que pretenda restarle autonomía al Instituto no sólo constituye una afrenta, sino una violación constitucional”.
Gerardo Triana, representante del Partido Revolucionario Institucional, dijo que existe la intención en la Cámara de Diputados, en aras de una supuesta racionalización del gasto público, de disminuir el presupuesto del Instituto Nacional Electoral.
“Desde nuestro punto de vista se estaría provocando una grave afectación a este Instituto, al sistema electoral mexicano y, en consecuencia, a quienes formamos parte de él: los partidos políticos”, afirmó.