Mañana sábado 21 de noviembre quedarán exactamente dos años para la próxima edición, la más innovadora, de la Copa Mundial de Fútbol. La naturaleza compacta del evento, el moderno diseño y la cautivadora cultura local, elementos que caracterizarán a la primera edición del torneo que se celebrará en Oriente Medio y el mundo árabe, son garantías de la extraordinaria experiencia que se podrá vivir en Catar 2022.
Entre las numerosas características distintivas de la competición, los aficionados que se desplacen hasta allí tendrán la posibilidad de asistir a más de un partido al día durante la fase de grupos, lo que constituye un programa muy atractivo de cuatro encuentros diarios, tal y como se anunció hace unos meses.
La infraestructura prevista para el evento se ha concluido en un 90% y los tres estadios ya terminados -el Internacional Jalifa, el Al Yanub y el Ciudad de la Educación- han albergado más de un centenar de encuentros durante 2020 a pesar de la pandemia de covid-19. Otros tres estadios de la competición están en fase final de construcción: Al Rayán, Al Bait y Al Zumama. Las obras principales de los dos estadios restantes -el Ras Abu Abud y el de Lusail- se terminarán en 2021.
En julio, se confirmó que el partido inaugural se jugará en el impresionante Estadio Al Bait, con un aforo de 60 mil personas y diseñado para evocar las carpas tradicionales del mundo árabe. La final se disputará en el Estadio Lusail, con 80 mil localidades, el 18 de diciembre de 2022, festivo en el que se celebra el Día Nacional de Catar.
Las infraestructuras de todo el país también se están terminando a buen ritmo, entre ellas el modernísimo suburbano de Doha -que la afición pudo utilizar durante la Copa Mundial de Clubes Catar 2019, las nuevas carreteras y la ampliación del Aeropuerto Internacional Hamad, el cual registrará más de 50 millones de viajeros anuales de cara a 2022.
Catar acogerá la versión más compacta de la Copa Mundial de los últimos años. Todos los estadios están situados a poca distancia unos de otros y estarán conectados por ultramodernas infraestructuras de transporte. La afición, los jugadores y la prensa podrán desplazarse entre ellos en poco tiempo.
Los visitantes podrán permanecer en un solo alojamiento durante toda la estancia y no tendrán que tomar vuelos internos. La mayor distancia entre estadios es de 75 km (entre el Al Bait y el Al Yanub) y la menor es de apenas 5 km (entre el Ciudad de la Educación y el Al Rayán).