Un atacante suicida estrelló el lunes una motocicleta cargada de explosivos contra una patrulla conjunta de la OTAN en Afganistán y causó la muerte a seis efectivos estadounidenses, en la agresión más mortífera contra las fuerzas internacionales desde agosto.
El ataque tuvo lugar en momentos en que combatientes del Talibán capturaron un distrito estratégico en la provincia de Helmand, en el sur, que fue escenario de algunos de los choques más sangrientos entre esa organización y las fuerzas internacionales de combate antes de que se retiraran parcialmente del país en 2014, situación que agrega peso a las afirmaciones del Pentágono de que la insurgencia ha adquirido fuerza.
En Washington, funcionarios dijeron que los fallecidos en el ataque fueron seis estadounidenses en tanto que los heridos, dos estadounidenses y un afgano. El secretario de Defensa estadounidense, Ash Carter, había hecho hace días una escala en Bagram.
Los soldados fueron atacados cuando se desplazaban por una aldea cerca del aeródromo de Bagram, la instalación militar estadounidense más grande en Afganistán, dijeron fuentes de la OTAN y del país. El Talibán se adjudicó el ataque.