La dirección de Protección Civil Municipal detalló mediante su titular Galo Alonzo Barrancos que lo sucedido el día lunes en el gimnasio BFIT “es plena responsabilidad del dueño, al final de cuentas ellos deben contar con el personal para poder atender cualquier contingencia como lo que sucedió”.
Ante una situación de violencia, los encargados del establecimiento deben intervenir para separar o impedir que suceda cualquier conato de pleito o situación personal que haya entre los clientes; “la situación es plena y completa del propietario darle seguridad al cliente para que pueda estar bien”, situación que no se dio.
Alonzo Barrancos puntualizó en que “si se hubiera llamado al 911 las autoridades correspondientes hubieran canalizado el hecho” mostrando así un correcto manejo del suceso de violencia, la cual no se supo manejar y simplemente se dejó correr.
Mencionó que dicho establecimiento únicamente cuenta con las medidas de seguridad básicas: señaléticas de evacuación, salida de emergencia, entrada y salida, escaleras seguras, que hacer en caso de incendio y huracanes.