El gogernador de Guerrero Rogelio Ortega, parece haber perdido la razón de estar donde está pues dijo que el combate a la producción y tráfico de drogas en Guerrero “es una guerra perdida” que genera la violencia que “golpea” a sus habitantes, y continuará así hasta que no haya una legalización de su venta, afirmó este viernes el gobernador de la entidad, Rogelio Ortega.
Cuestionado sobre el asesinato de al menos 15 personas de las últimas horas en el estado, el gobernador atribuyó la violencia a la disputa de delincuentes por el narcotráfico, principalmente la producción de amapola.
Ortega dijo que la violencia es una de las “herencias” que recibió al asumir el cargo en 2014, nombrado por el Congreso cuando Ángel Aguirre se vio obligado a dejar el cargo. El mandatario reconoció que su estado es el “productor número uno en el país” de amapola, la cual ya no sólo es cultivada y transportada hacia otras entidades o paíeses, sino que en el propio estado, han surgido laboratorios del narcotráfico para crear heroína.
Luego de que el mandatario dijo este jueves ante legisladores federales que el estado está al borde de la quiebra y pidió adelantar la transición para ya no seguir “lidiando con el toro”, los líderes del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano señalaron que tales declaraciones demuestran el ”vacío de poder” ante las condiciones de violencia en Guerrero.