Mucho se ha hablado del joven faraón Tutankamón quien falleció aproximadamente a los 20 años, el misterio siempre lo ha rodeado pero casi nadie sabe otras peculiaridades descubiertas cuando la tumba se abrió por primera vez.
Resulta que con su hallazgo, también se descubrieron tres cosas que llamaron la atención de propios y extraños, la primera es que al faraón no se le encontró su corazón (al parecer le fue sustraído al momento de morir).
Otra más es que su cuerpo había sido teñido de negro sin saber las razones aun.
Y la más sorprendente y curiosa es que al analizar la momia del faraón este tenía una erección de 90 grados, misma que se conserva hasta el momento, ¿Qué aguante no?
De acuerdo con el egiptólogo Salima Ikram, profesor de la Universidad Americana del Cairo , el pene erecto del Rey Tutankamón, el avatar del sol, sugiere sus poderes
regenerativos y la ausencia de su corazón o de un reemplazo con un escarabajo podría tener que ver con el mito de Osiris, quien fue despedazado por su hermano Set.
Por su parte, la pigmentación negra de la piel parece relacionarse con la representación esotérica de Osiris como un dios negro, algo que lo conecta con dioses como Krishna o Shiva en su aspecto negativo.