Con sólo 24 años, apenas en los albores de su carrera en la Liga Mexicana del Pacífico y ya inscribió su nombre en el libro de récords. Amílcar Gaxiola se bañó de gloria al lanzar juego sin jit ni carrera en el triunfo de los Venados de Mazatlán con pizarra de 8 por 0 sobre los campeones Naranjeros de Hermosillo.
Gaxiola (5-1) lanzó el juego número 47 sin jit ni carrera en la historia del circuito en el rol regular.
El zurdo se convirtió en apenas en el cuarto lanzador de los Venados que lanza un No-No, sumándose a Ken Frailing, Rafael García, Blaine Beatty y Andrés Cruz.
Por su parte, es apenas el tercer sin jit que le lanzan a Naranjeros en la historia de la LMP. El último fue en 1989.
Lo suyo fue tejer una verdadera pieza monticular de nueve episodios, regaló sólo cuatro pasaportes y ponchó a cuatro, en ruta que le consumió 118 lanzamientos.
El único batazo de apuro que le conectó la ofensiva naranja llegó en la cuarta tanda, a cargo de Jerry Owens por los rumbos de la segunda base que finalmente se acreditó como error del camarero.
En su respaldo, su ofensiva armó rally de tres en la misma primera tanda ante el derrotado Roy Corcoran (2-3) y sumó dos en la quinta y otras tres en la sexta.
Jesse Castillo bateó de 4-2 por los Venados, con dos carreras producidas y dos anotadas mientras que Héber Gómez se encargó de remolcar tercia de rayitas.
Corcoran se llevó esas tres anotaciones en dos completas, con tres bases y dos ponches.
Gaxiola retiró la novena dominando a Jorge Flores con elevado a segunda, a Héctor Hernández con rola a sus manos y tras pasaporte a Justin Greene, sacó el out 27 con elevado de Matt Padgett al derecho.
La recta pegada y sinkers afuera para bateadores derecho fueron las armas principales que usó Amilcar Gaxiola para dominar a la dura artillería de los Naranjeros de Hermosillo.
Horas después de su proeza el zurdo narró sus experiencias. “Lo que sucedió es una bonita recompensa que me da Dios y por supuesto una gran motivación para seguir trabajando, para que valga la pena lo que se vive en este deporte, nunca he dicho hoy no voy a trabajar, siempre trabajó fuerte con mis coaches, con mis trainers, espero que todo siga así y tengo la fe pues cuando uno piensa positivo las cosas se te van a dar tarde que temprano” manifestó el oriundo de Culiacán.
“Me la creí hasta que cayó el último out, pero ya desde la sexta entrada estaba consciente de lo que estaba haciendo, de hecho en algún instante no sabía ni qué cantidad de lanzamientos tenía pero me sentía muy fuerte, me enfoqué en hacer mi trabajo, no hacer nada más de lo que sé hacer”, agregó.