El diario The Sun publicó el relato de Molly Skye Brown, de 42 años, quien detalló como Ghislaine Maxwell trató de reclutarla como “modelo y masajista” cuando tenía apenas 14 años, en Palm Beach, en 1992.
Relató que ella hacía ejercicio en un gimnasio para niños en Palm Beach, Florida, cerca de la mansión del multimillonario, cuando la ex esposa de Epstein la vio por primera vez.
“Estaba trabajando en un gimnasio en el condado de Palm Beach en la guardería; te daban una membresía gratuita si trabajabas allí de dos a cuatro horas el fin de semana. Estaba en la máquina elíptica haciendo ejercicio, que está junto a la ventana delantera”.
“La vi pasar y se detuvo -continuó-. Yo era la única que estaba allí. Me miró de arriba a abajo, luego entró en el gimnasio, caminó hasta el mostrador, y pude oírla decir: ‘No voy a tardar mucho, sólo quiero hablar con esta chica’”.
La pareja de Jeffrey Epstein se presentó como representante de modelos, le entregó una tarjeta de presentación y le dijo que “fácilmente podría pasar” como una joven de 18 años.
“Estaba empezando a dedicarme más al modelaje, la actuación, el canto y los concursos, con la expectativa de ganar algo de dinero para becas o subvenciones para continuar mi educación”.
Maxwell le prometió trabajos como modelo de Victoria’s Secret y como masajista, por lo que Brown respondió que prefería actuar y cantar, ya que no veía futuro en el modelaje por una displasia congénita de cadera que le impedía caminar con normalidad.
“Me sometí a una cirugía reconstructiva, pero mis rodillas están dislocadas, cojeo y agencias profesionales me han dicho que nunca fui material de modelaje de pasarela. Le dije a Maxwell que realmente prefería la actuación, el canto y el teatro musical”. “Bueno, si cambias de opinión tengo muchas oportunidades como modelo”, le respondió.
“Ella era sólo una depredadora que merodeaba por las calles, no tengo ninguna duda. Ahora he tenido otros que me dicen que soy exactamente el tipo; encajo perfectamente en el proyecto”, declaró Brown.