En el marco del proceso de acercamiento entre Estados Unidos y Cuba, el Departamento del Tesoro estadounidense autorizó a algunas empresas de su país para que operen servicios de ferry con pasajeros a la isla, por primera vez en más de medio siglo.
Los pasajeros que sean transportados deben estar comprendidos dentro de las doce categorías bajo las cuales se permite a los estadounidenses viajar a Cuba, entre ellas visitas familiares o con fines académicos, culturales, deportivos o religiosos, según las directrices del Tesoro. El turismo, sin embargo, sigue estando prohibido, bajo el embargo vigente desde 1962.
Esta medida ocurre en medio del histórico acercamiento anunciado en diciembre por los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, luego de más de 50 años de enemistad.
Dos empresas navieras en el estado de Florida –a 150 kilómetros de la costa cubana– dijeron haber recibido luz verde del Tesoro, aunque destacaron que el servicio aún debe recibir aprobación de otras agencias del gobierno estadounidense, así como de las autoridades de La Habana. Por lo tanto, se espera que el servicio recién pueda concretarse dentro de algunos meses.