Para sobrellevar la conocida cuesta de enero, que es el incremento en el precio de la canasta básica, servicios del hogar, gasolina y demás, los campechanos optan por diferentes técnicas para hacer rendir sus ingresos durante los primeros tres meses del año. Tiempo en el que suele estabilizarse la economía familiar.
Una de estas estrategias es acudir a las casas de empeño para dejar joyas, electrodomésticos, celulares, computadoras, incluso herramientas para conseguir dinero y solventar gastos como el regreso a clases y la liquidación de deudas generadas en el mes de diciembre.
En la capital campechana, los gerentes de diferentes casas de empeño, informaron que a pesar de dicha situación, este año no han recibido gran número de personas interesadas en dejar sus artículos, la baja se ubica en un 40 por ciento en comparación hasta hace dos años. Dicen que ahora se prefiere adquirir un préstamo que pagar un refrendo.
El empeñar obliga que la gente realice un pago mensual para que el artículo empeñado no se pierda, mismo que se vuelve difícil y se deja de hacer. Como ejemplo, en el Nacional Monte de Piedad, se tiene hasta 20 meses para pagar si se empeña una joya, haciendo 3 refrendos.
Al final del plazo del empeño se debe pagar el desempeño junto con los intereses generados e IVA en un plazo de quince días, todo esto en relación a la cantidad que se haya entregado a la persona en relación al valor de la prenda. En ese panorama, se ha convertido, en cierta manera, más fácil pagar una mensualidad, la cual puede generar o no intereses, sin perder algún objeto de valor material o sentimental.