Un expolicía se convirtió en el segundo detenido por el homicidio de un fotoperiodista y cuatro mujeres en Mexico, un crimen que según las revelaciones fue ejecutado de forma profesional y despiadada, y que sigue suscitando reclamos internacionales de justicia.
La Fiscalía capitalina informó de la aprehensión de Abraham Torres Tranquilino, un expolicía de 24 años que había sido sentenciado por torturas, por su relación con el múltiple crimen en que fueron ultimados el reportero gráfico Rubén Espinosa y la activista social Nadia Vera.
Por este caso, las autoridades detuvieron el 4 de agosto a Daniel Pacheco Gutiérrez, otro exconvicto que estuvo en prisión por violación.
Espinosa y Vera se habían refugiado en Ciudad de México tras recibir amenazas de muerte en Veracruz, un estado del este mexicano en donde 12 periodistas han sido asesinados desde el 2010.
Un mes después del múltiple homicidio, centenares de periodistas, escritores y artistas -entre ellos el cineasta ganador del Oscar Alfonso Cuarón y el escritor británico de origen indio Salman Rushdie– publicaron este lunes una carta en que por segunda vez piden justicia y celeridad en las investigaciones al presidente Enrique Peña Nieto.
“Cuando se ataca a un periodista se atenta contra el derecho a la información de la sociedad entera”, indica la misiva publicada por el diario El Universal, cuya primera página estaba envuelta por una hoja en negro con la leyenda “No nos callarán”.
México es uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo con más de 80 reporteros asesinados y 17 desaparecidos desde 2000 según Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Además de Espinosa y Vera, fueron asesinadas Mile Virginia Martín (colombiana, 31 años) y Yesenia Quiroz (19 años), ambas modelos, así como Alejandra Negrete (40 años), empleada doméstica.