Una semana antes de la gran boda que siempre soñó, Alex Lanchester, una joven británica recibió una llamada que cambió su vida para siempre, el padre de su prometido le había comunicado que el novio había muerto.
Ante la noticia la joven que sintió desfallecer, pasó días enteros encerrada en su habitación llorando y tratando de asimilar como el amor de su vida, había muerto justo una semana antes sellar su promesa de amor frente al altar.
Pasados los días, tomó fuerza y decidió ir a dar el pésame a quienes estuvieron a punto de convertirse en su familia, sin embargo, la noticia que se llevó al enfrentar a los padres de Tucker Blandford fue aun peor, los padres no sabían de ella y finalmente descubrió que había fingido su muerte para evitar contraer nupcias con ella.
Quien le habló a Alex Lanchester fue en realidad un amigo de la pareja que se hizo pasar por el padre del novio, quien en su llamada le dijo que se habia suicidado arrojándose a un auto en movimiento debido a la depresión que en secreto padecía.
Fue la misma joven quien decidió hacer pública su historia asegurando una sola cosa: “Lo único que hice fue amarlo”. Increíble ¿no?