El adviento es una época del año en la que las familias deben aprovechar para reflexionar y mejorar su relación con los demás manifestó el sacerdote José Luis Ye Ehuan, párroco de la iglesia del municipio de Dzitbalché lamentando que la paz se este perdiendo.
A unos días de que se celebra el nacimiento del niño Dios, refirió que el tiempo que se vive actualmente es difícil por la pandemia pero que todo ello no debe alejar al hombre de la vida espiritual por ello dijo que el 2022 debe ser propicio para volver al camino de la fe
También destacó qué afortunadamente no se ha perdido la tradición en las familias de instalar el nacimiento del niño Jesús para ponerlo en el pesebre la noche del 24 de diciembre antes de la cena de Navidad.
El sacerdote dijo que el convivio en familia este 24 debe tener como base el amor entre los integrantes y que sea un momento para compartir y no solo de diversión donde no falta el alcohol y luego muchas veces terminan en conflictos, por ello exhorto a evitar los excesos.