Hace unos días se daba a conocer el caso de una doctora en Zamora, Michoacán que había sido rescatada tras ser secuestrada presuntamente en venganza por lo padres de un menor que falleció bajo sus cuidado, la historia ha dado un giro sorprendente.
Resulta que Mere Balanzar Esquivel, que sí es doctora del IMSS, fingió su secuestro e incluso se llegó a lastimar con un solo objetivo, llamar la atención de su ex pareja a quien en todo momento le mandó mensajes de texto para advertirle de su “secuestro” y que fuera a rescatarla, sin embargo, eso nunca ocurrió.
Al momento de su rescate por las autoridades, la mujer fue encontrada amarrada con una cadena a la reja de una casa abandonada, con los ojos vendados con cinta canela y con evidentes cortes debajo del busto y en el vientre. Ahí “la doctora” dijo le habían extraído el producto de un embarazo de 14 semanas de gestación.
La noticia que conmocionó a Michoacán y al resto del país, finalmente fue aclarada por la Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJ) quien no solo confirmó que la mujer no estaba embarazada sino las muestras de tortura, secuestro y mensajes fue planeado y orquestado por ella para llamar la atención de su ex marido.
En conferencia de prensa, el procurador José Martín Godoy Castro dijo que la doctora cayó en múltiples contradicciones en sus declaraciones. “La doctora tiene problemas psicológicos y fue un montaje para perjudicar a su pareja, hecho que la misma profesionista reconoció”, señaló.
Según el procurador, la doctora atravesaba “un momento difícil” con su pareja, quien vive en Minatitlán, Veracruz, lo que al parecer orilló a la mujer a fingir un secuestro y así obligar a su novio a ir a Zamora para reunirse con ella.
Para simular el secuestro, la doctora adquirió distintos chips telefónicos mediante los que hizo llamadas a su ex pareja para decirle que estaba secuestrada y sometida a tortura. Tras investigar el teléfono celular, la dependencia estatal determinó que las llamadas se habían hecho desde un hotel de la Ciudad de México y que el aparato era propiedad del hijo de la víctima.
En el mismo hotel donde se hospedó con un nombre falso la doctora se hizo algunas cortadas en los senos y se produjo una incisión en el pubis que ella misma suturó, empleando un tubo de metal y navajas de afeitar, detalló el procurador.
Cuando regresó a Michoacán, Balanzar Esquivel compró la cadena y demás materiales con los que se amordazó y ató de pies y manos, afirmó la PGJ, quien también anunció ejercerá acción penal contra la médico residente familiar de Oportunidades, asignada a la Unidad Médica Familiar del IMSS en Zamora.