“Habemus Papam” es la frase en latín que el protodiácono usó para anunciar que el cónclave había elegido al que ahora es el primer Papa Latinoamericano, Jorge Mario Bergoglio S. J. (Buenos Aires, 17 de diciembre de 1936. 76 años) de la orden de los Jesuitas.
A las 7:06 p.m. hora de Roma, la fumarola de la chimenea que anuncia que se ha elegido al nuevo sucesor de Pedro, expidió el humo blanco esperado por todos los congregados en el Vaticano.
La Plaza de San Pedro, repleta de fieles, protegidos con sombrillas por el clima, vitorearon y acompañaron el repicar de las campanas de la Basílica de San Pedro.
Francisco I es quien guiará a los fieles en esta nueva etapa de la Iglesia católica. Se espera, por el nombre elegido, tomado de San Francisco de Asís, que su pontificado sea
Como siempre, los ánimos de anticipación de los diferentes medios de comunicación vaticinaron muchos nombres pero para todos fue una sorpresa que fuera un Cardenal nacido en Argentina. Muchos consideraron que sería elegido un cardenal de Italia y quizá por su origen italiano, Francisco I, cumpla varias condiciones que los conocedores apuntaban serían importantes en este proceso.
Jorge Bergoglio nació en la ciudad de Buenos Aires el 17 de diciembre de 1936, hijo de un matrimonio de italianos formado por Mario Bergoglio (empleado ferroviario) y Regina (ama de casa). Egresó de la escuela secundaria industrial E.N.E.T Nº 27 (ahora E.T.Nº 27) Hipólito Yrigoyen, con el título de técnico químico. A los 21 años (en 1957) decidió convertirse en sacerdote. Ingresó en el seminario del barrio Villa Devoto, como novicio de la orden jesuita.
Fue Presidente de la Conferencia Episcopal de Argentina durante dos períodos.