Google anunció cambios en sus políticas de privacidad como una manera de simplificarlas para sus usuarios y darles así una mejor experiencia. De inmediato, Microsoft ofreció sus propias alternativas en la red, aduciendo que los usuarios de su correo electrónico gratuito, Hotmail, no tienen que preocuparse de que el contenido de sus mensajes sea utilizado para dar pistas de sus preferencias a los anunciantes. Incluso, pidió que le dieran a Hotmail una oportunidad y dejaran Gmail, el servicio de Google.
En medio de esa reacción, Google debió responder a las inquietudes surgidas en el Congreso de los EEUU, dando respuesta a todos los interrogantes de distintos parlamentarios a través de un documento público.
Pero Microsoft llevó las cosas más allá y acusó a Google en avisos a toda página que aparecieron en la prensa escrita, incluyendo USA Today, The Wall Street Journal yNew York Times.
“Cada dato que Google recoge y vincula contigo aumenta el valor que tienes para un anunciante”, advierte Microsoft en los anuncios.
En reacción, Google respondió en un blog lo que calificó como la refutación de “mitos”sobre su política de privacidad. “Nuestros controles de privacidad no han cambiado. Punto”, dijo Google.
La compañía no niega que sirva a los anunciantes con base en palabras en correos escritos por los usuarios de Gmail, pero agrega que es un proceso automático similar al que separa a los correos que considera legítimos de los no deseados. Dijo que ha operado así desde la introducción de Gmail en 2004. Ambas compañías ofrecen varios controles para impedir que los anunciantes rastreen la actividad de los usuarios en línea.
Frank Shaw, vicepresidente corporativo de Comunicaciones de Microsoft, escribió un duro texto en un blog oficial de la empresa. Tildó de “impopulares” los cambios en las políticas de privacidad de varios productos de Google y dijo que ahora “haría más complicado, no más sencillo, a la gente mantener el control de su propia información”.