Kim Jong, líder norcoreano, manifestó que se sentía agradecido de que “ni una sola persona” de Corea del Norte hubiera contraído el nuevo coronavirus, que provocó una pandemia desde su aparición en China.
Cabe recordar que Pyongyang cerró sus fronteras en enero para intentar protegerse de la epidemia y suele informar regularmente de que no se declararon casos de COVID-19 en su territorio, pero los medios públicos habían evitado este tipo de declaraciones explícitas en los últimos meses, priorizando los mensajes sobre las medidas de prevención.
Kim Jong-un manifestó que deseaba “buena salud a todas las personas del mundo que luchan contra los males de este funesto virus”.
Lo anterior, en el marco del gigantesco desfile militar donde participaron soldados sin mascarillas.
Además, ni los participantes ni el público asistente llevaban mascarilla, pero había muchos menos ciudadanos de los que suele haber en la plaza.
Según indicaron en un comunicado los jefes de Estado Mayor de Corea del Sur, el desfile habría tenido lugar a primera hora de la mañana de este sábado cuando se “detectaron señales de un desfile militar con gente y equipo” en la plaza de Kim Il Sung de Pyongyang.