Cada año se hace menos presente el martes de pintadera en los barrios y colonias populares de la ciudad, y es que lo que solía ser un gran festejo para chicos y grandes ahora ha quedado prácticamente sólo en un recuerdo.
En Samulá la gente hace su mayor esfuerzo porque se preserva esta tradición al menos unos años más tratando de transmitirla a los más pequeños de las familias pero sólo en este poblado y en otros puntos como Lerma se puede vivir la pintadera.
En algunas familias todavía se vive la pintadera pero con algunas modificaciones y es que muchos prefieren un rato de convivencia familiar a la hora de la comida momento en el que los más pequeños se pintan pero esto es poco común.
El punto más importante continúa siendo el Foro “Ah-Kim-Pech” aunque desde hace algunos años el martes de pintadera qué es amenizado por un grupo musical sólo acuden unos cuantos que no logran llenar ni la mitad del recinto y este año no fue la diferencia.