Con pasos cada vez más agigantados es como la tecnología ha coadyuvado en la evolución de la medicina a nivel mundial y es que en Pekín, médicos lograron colocar el implante de la primera vertebra impresa en 3D, en un niño de 12 años.
Un grupo de médicos de la Universidad de Pekín, realizó una compleja cirugía de cinco horas sobre un paciente de 12 años con el objetivo de retirar una vértebra afectada por un tumor maligno.
Como reemplazo, en la intervención se aplicó la primera vértebra impresa en 3D, que usa titanio como material básico. Un dato muy interesante sobre la pieza es que los expertos incluyeron poros muy pequeños, de forma tal que los huesos pueden crecer dentro de ella, lo que lleva a un anclaje mucho más natural, sin necesidad de tornillos invasivos u otra clase de elementos.
Ahora, el paciente se encuentra en recuperación y tendrá que pasar algunos meses para saber si el implante resultó un éxito o si necesitará más adecuaciones para su correcto funcionamiento.
Aún así, la relación entre la medicina y la impresión 3D sólo puede volverse más fuerte. Las reproducciones exactas de los huesos están dentro de las capacidades que tiene la tecnología actual, y a medida que mejoran los métodos de impresión y los materiales, los implantes serán más livianos, más fuertes, y menos agresivos para los pacientes.