Luego de que medios nacionales e internacionales aseguraran que una madre con sus dos hijas perdieran la vida a causa de los impactos de bala que recibieron, procedentes del helicóptero de la Semar, la Secretaría de Marina desmintió que elementos le dispararan durante un enfrentamiento contra sicarios, en Tamaulipas.
Indicó que en los acontecimientos registrados en Nuevo Laredo en ningún momento se excedió el uso de la fuerza por parte del personal de la Armada de México.
La dependencia afirmó que en este hecho el personal naval trabajó en estricto apego a los procedimientos establecidos en el Manual del Uso de la Fuerza, de Aplicación Común a las Tres Fuerzas Armadas y respeto a los Derechos Humanos, “anteponiendo en todo momento el compromiso que tiene con las familias mexicanas y en particular con las del Estado de Tamaulipas, para mantener la seguridad”.