Fuerte susto se llevó una familia, al percatarse que su menor hijo no se encontraba junto a ellos, cuando realizaban sus compras en el Mercado “Pedro Sainz de Baranda”.
Y es que alrededor de las 10:15, una mujer solicitó la ayuda de un elemento de Vialidad, a quien le dijo, que se había encontrado a un pequeño quien gritaba y lloraba desconsoladamente en busca de sus padres.
Por lo que el elemento de Vialidad auxilió al menor, quien estuvo a punto de ser arrollado en una de las calles del Centro de la Ciudad, ya que en su desesperación por buscar a sus padres cruzó inesperadamente las arterias.
Eran cerca de las 10:15 horas de ayer, cuando un agente de la Policía Estatal Preventiva, del cual no se proporcionaron sus datos por seguridad, realizaba algunas compras con su esposa e hijo en el mercado principal, pues se encontraba en su día de descanso.
En un descuido que dio el agente, el pequeño de tan sólo seis años de edad, se separó de su familia, por lo que corriendo atravesó las calles hasta llegar al Centro de la ciudad capital. Algunos ciudadanos se sorprendieron al observar al niño correr sin precaución por las arterias.
La mujer, que observó la actitud desesperada del pequeño lo retuvo y al notar la presencia de un agente de la Dirección de Vialidad a bordo de la unidad 01079, le realizó señas por lo que se detuvo, y después de escuchar la versión de la fémina el servidor público se hizo responsable del menor y dio parte a la central de radio C-4 de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección a la Comunidad, de donde dieron alerta a otras unidades.
Más tarde, al no sentir la presencia de su hijo, el padre recorrió los locales del mercado en su búsqueda, pero al no encontrarlo solicitó el apoyo de los agentes de la unidad 196 de la PEP, quienes lo abordaron para peinar la zona, y también dieron parte al C-4 vía radio.
Fue así que la central de la corporación policiaca, le dio indicaciones al agente de vialidad, para permanecer en la esquina de las calles 10 por 53, donde los elementos de la PEP, llevaron al angustiado padre para reunirse con su hijo.
Al final, el incidente sólo quedó en un gran susto para el padre y su hijo, quienes al reunirse de nuevo se dieron un fuerte abrazo.