En la actualidad, la pesquería industrial del camarón es una de las más importantes en el Golfo de México, porque representa fuente de ingresos y empleos para miles de familia, pero también contribuye a la captura incidental de peces, crustáceos y hasta moluscos, aún cuando en el litoral campechano no represente ni el uno por ciento de la producción total anual que capturan los barcos de altura, señaló el subdelegado de Pesca, Alejandro Isidro Medina.
Dentro de la fauna de acompañamiento, también conocida como captura incidental, del camarón de altura, el grupo de mayor abundancia son los peces, comúnmente de especies como pargo, huachinango, chac-chi y bagre que caen durante el arrastre de las redes.
Estudios indican que anualmente los barcos de altura echan por la borda alrededor de 200 especies que se quedan en las redes como fauna de acompañamiento, de las cuales unas 37 especies significan un importante valor comercial.
Inclusive, según cifras oficiales, en promedio, por cada kilo de camarón se capturan 10 kilos de fauna de acompañamiento.
Sobre el tema, el coordinador de la Conapesca en Campeche, Alejandro Isidro Medina estimó que en un viaje de 35 a 40 días, por embarcación, se registra en promedio de un 10 a 15 por ciento de fauna de acompañamiento.
“Puede tratarse de un sin fin de variedades que son las que habitan en la parte del fondo donde se encuentra el camarón, pero no son grandes volúmenes ni grandes cantidades, se trata del 10 al 15 por ciento máximo en relación con el volumen de la producción capturada de camarón”, dijo.
Sin embargo, señaló que esa fauna de acompañamiento tienen que declararlo los titulares de los permisos de pesca en los avisos de arribo.
“Forzosamente en los avisos de arribo debe reportarse como fauna de acompañamiento y en ese registro se determina qué especies son las que vinieron dentro de la red, por lo que es obligatorio para las embarcaciones y los titulares de los permisos que declaren todo aquello que haya sido capturado mediante los permisos que tienen ellos”, expuso.