Aún con todas las campañas de sensibilización del DIF Estatal y de dependencias altruistas, la discriminación a las personas con alguna discapacidad es una realidad en Campeche.
El delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Eleazar Herrera Vázquez, destacó que en este regreso a clases, las únicas quejas que hubo en contra de centros educativos fueron por discriminación.
“Hasta el día de hoy, no hemos tenido ninguna queja acerca de los costos de los útiles escolares o que los padres de familia sean obligados a pagar una cuota extraordinaria en las escuelas, lo único que hemos tenido hasta el día de ayer fueron cuatro denuncias en diferentes escuelas de paga por no dejar inscribir a sus hijos por discriminación”, señaló Herrera Vázquez, quien lamentó no poder dar los nombres de las instituciones.
Herrera Vázquez comentó que uno de estos casos, fue porque un menor de edad con capacidades diferentes pretendía ingresar a una escuela particular y de “renombre”, pero por su situación fue rechazado.
“Los otros tres casos eran porque los padres son solteros o por ser mamá soltera, hasta el momento son las únicas denuncias que hemos tenido pero se llegó a buen arreglo con las escuelas, mandamos a citar las dos partes para verificar la situación”, explicó.
Dijo que esta discriminación no debe existir en estas fechas, mucho menos en centros educativos donde te enseñan a ser mejores personas. Precisó que las multas por esta situación, van desde los 500 mil pesos si la escuela tiene instalaciones propias y si son escuelas que rentan puede ser desde 15 mil pesos.