El nuncio apostólico en México, Christophe Pierre, rechazó que exista temor por el clima de inseguridad que se vive en el país, ante la visita que podría realizar próximamente el Papa Benedicto XVI a suelo mexicano.
En conferencia de prensa, el prelado dijo que si bien es obvio que una visita de ese tipo demanda una logística de seguridad en torno al Papa, no existe miedo, pues de hecho la máxima autoridad de la Iglesia Católica viene a dar un mensaje de amor y en contra de la cultura del miedo y el odio.
“El Papa viene a recordarnos el mensaje de amor que nos dejó Jesucristo, que debemos dejar atrás el miedo y luchar contra esa cultura del odio que hace menoscabo del valor de la vida humana y que hace suponer a algunos que son más fuerte que Dios”, explicó.
En cuanto a esa “cultura del odio” de la que dijo hablar, enfatizó que “sólo hace falta ver los encabezados de los periódicos que suelen salir prácticamente todos los días para que se entienda de que se habla y de lo que debemos enfrentar con el mensaje que nos ha dejado Jesús”.
“De eso viene a hablarnos el Papa, de la necesidad de no sólo escuchar su palabra a través del Evangelio, sino leerla, entenderla y aplicarla todos los días, difundir los valores del amor a la vida, el amor al prójimo, a la familia y dejar atrás el individualismo y la soberbia”, reiteró.
Sobre la fecha y lugares que visitaría Benedicto XVI en su paso por México, el nuncio aclaró que eso todavía no se define, “se analiza todavía, yo espero pronto ya tener información, la cual se dará a conocer con oportunidad”.
Al preguntarle si Yucatán está definitivamente descartado de los planes de la visita papal, el representante del Vaticano en México, dijo que no se puede descastar, “pero tampoco puedo comprometer algo que, como les dije, todavía está por definirse”.
Sin embargo, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) ya informó que el año próximo el Papa Benedicto XVI visitará el país para alentar a los católicos mexicanos a preparar el “Año de la Fe”, que iniciará en octubre de ese año, y la participación de México en el proceso de evangelización.
Refirieron que la Ciudad de México está descartada como punto de visita del Santo Padre, por su altura sobre el nivel del mar, lo que significa un problema para la salud y la edad de Benedicto XVI y tampoco acudirá a ciudades que ya fueron visitadas por el Papa Juan Pablo II.
Luego de la conferencia de prensa, Christophe Pierre encabezó una misa en la Iglesia de San Sebastián ubicada en el barrio del mismo nombre en el marco de la XXIII Conferencia Mexicana de Institutos Seculares que se desarrolló en esta ciudad.