Ciudad del Carmen: Ante cientos de carmelitas que la recibieron con gritos de “Layda, Layda, Layda; Layda gobernadora”, al ritmo incesante de la batucada, la candidata de la coalición morena-PT “Juntos haremos historia en Campeche”, Layda Sansores San Román, aseguró que volveremos a reconstruir este Campeche que un día secuestró una pandilla de pillos sin escrúpulos.
Al arrancar su campaña político-electoral en esta ciudad, señaló que “estamos hartos de los Alitos y de la gente que ya no tiene escrúpulos; estamos hartos de la corrupción, es un cáncer que nos ha robado el patrimonio y nosotros juntos vamos a combatirla, porque como dice Mario (Delgado) ahora ellos son los que se van”.
Denunció que están amenazando a los trabajadores de gobierno, si no votan por el “sobrinito”, les revisan hasta las redes para ver cuántos mensajes a favor, como si fuera una tiranía. Nuestra lucha, dijo, no es contra los trabajadores, a ellos hay que defenderles sus derechos; la lucha es contra los ladrones, “esos sí se van a largar a donde les corresponda”.
“Ayer decía algo aquí el muchachito, pero le mando un recado que le diga a su tío, que sí soy una amenaza, pero una amenaza para los corruptos, que se quede tranquilo”, señaló la abanderada morenista y recordó también los negocios de “Elito”, estafando a los ciudadanos con la venta de pollos e inventando encuestas que luego le desmienten.
Pidió a los morenistas estar unidos, participar de manera tranquila para ir por la transformación de Campeche sin titubeos, para arrasar en las elecciones del 6 de junio próximo, y recordó lo que un día le dijo Andrés Manuel López Obrador, que no se preocupara mucho por los que se dedican a transar “acuérdate cómo le ganamos, la estrategia se llama pueblo y es el pueblo el que va definir nuestro destino”.
López Obrador, recordó Layda, dijo hace tiempo que es la hora del sureste y es un acto de justicia, sin quitar nada al centro y al norte, sólo para emparejarlo, y ya lo estamos viendo con obras como el Tren Maya. Pero además, refirió el gran potencial de la cuenca hidrológica de Campeche, que serviría para que todos los campesinos del estado tengan riego y producir tres veces más, que ahora no ocurre porque se pierde el dinero; y recuperar la producción de arroz pues fuimos el principal exportador en los tiempos en que su padre Carlos Sansores Pérez fue gobernador. Se podrían producir las mil toneladas que México importa actualmente.
Ante el entusiasmo de los asistentes que no paraban de corear “Layda, Layda, Layda”, reveló que escogió El Carmen para iniciar campaña porque Dios puso aquí la entrada al paraíso y también por aquí entró la democracia al estado, aunque luego vino el petróleo con sus muchos problemas. Ahora, en su gobierno, Carmen será uno de los polos de desarrollo del estado y les dijo a los carmelitas que no tengan duda, López Obrador cumplirá su palabra comprometida, estarán aquí las oficinas de Petróleos Mexicanos.
Arropada por miembros de su familia (dos de sus sobrinas le dieron mensajes de aliento, una de ellas en maya), recordó el episodio de 1997 cuando la Resistencia Civil Pacífica que encabezaba, luego de que el PRI-Gobierno le arrebatara el triunfo electoral, fue arrasada por policías estatales y lastimaron a muchos entre ellos a su hijo Alberto que grababa los acontecimientos.
Relató que Alberto fue arrastrado, golpeado y secuestrado en los sótanos de Palacio de Gobierno, y salvó la vida gracias a que alguien dijo que era hijo de Layda, y eso frenó a los policías. Uno de sus golpeadores, tiempo después, fue a pedir trabajo a la casa familiar y se lo dieron, ella consultó a su padre pero no a su hijo Alberto. Hoy, dijo Layda, le pido perdón por equivocarme, “perdóname hijo, por primera vez te pido perdón, yo sé que te habían roto el cráneo, te habían partido la cabeza y lo peor te partieron la vida eso para una madre es lo que más duele. Ojalá que el perdón que te pido sea como esos sentimientos emotivos que dicen que consuelan el alma”.
La Candidata de morena agradeció y reconoció la suma de voluntades, como la de Raúl Pozos y toda su estructura sin pedir nada a cambio; la de Pablo Gutiérrez Lazarus, y la estatura de quienes compitieron internamente en Carmen: Alejandro Gómez Cazarín, Ramón Ochoa Peña y Ricardo Sánchez Cerino.
Traidores a la democracia-
Antes, el dirigente nacional de morena, Mario Delgado, expresó su emoción de estar en el inicio de campaña de Layda, a la que reconoció un liderazgo como no hay en el país y subrayó que es una mujer ejemplar, que ha acompañado al presidente López Obrador.
Dijo que Campeche merece la transformación, no a la pandilla de pillos que lo han gobernado, y llegó la hora de que se vayan. Hay que defender la esperanza, dijo, que llega a la mesa de los adultos mayores, a las escuelas de los hijos, al campo reverdecido, la esperanza que significa la 4T.
Pidió estar organizados para amarrar las manos a los corruptos y no permitir que nos quiten la esperanza. Hay que estar atentos porque la mafia de la corrupción no se va a quedar quieta, y señaló a Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, consejeros del Instituto Nacional Electoral, como unos “traidores a la democracia”.
Por su lado, el delegado en funciones de presidente de morena en Campeche, Erik Reyes, advirtió a los campechanos que hay que estar unidos porque se trata de recuperar Campeche de las manos de una tiranía corrupta y cínica que quiere seguir en el poder.
Hay que salir el 6 de junio a votar y decirle a esa alianza perversa que les vamos a ganar en las urnas; hoy se escribe el siguiente capítulo, Layda será gobernadora.