La suspensión concedida en el proyecto del Tren Maya, solo es para las comunidades de los quejosos: Xpujil, pero no quiere decir que no se pueda continuar con los procesos administrativos, que no afecten en un daño director a la comunidad, indicó Pedro Armentía López, secretario de Gobierno, quien puntualizó como Estado siempre se respetará lo que dicten y manden las comunidades y serán las Unidades responsables, las que tendrán que hacer sus temas jurídicos –sus defensas-.
-Tengo entendido pueden presentar una queja ante el Tribunal Colegiado y será éste quien diga si se mantiene, se revoca o si se modifica la sentencia –manifestó al tiempo que puntualizó se tiene que respetar lo que las comunidades indígenas digan y lo establece el OIT 169: “una consulta libre, previa, informada, de buena fe, que se realicen en todas y cada una de sus etapas”.
Aclaró son dos cosas distintas las consultas ciudadana e indígena y en esta última su fin era llegar a acuerdos entre las comunidades que podrían resultar afectadas.
-Hemos dejado que siga cauce legal porque nosotros no somos ni empresarios interesados, ni juez, ni parte; es un tema con la unidad responsable, que es Fonatur y la gente que está realizando el proyecto del Tren Maya; pero no suspende cualquier acto o acción administrativa, puede seguir la licitación, el permiso de impacto ambiental, todavía hay que darle cauce legal y esperar los procedimientos que marca la Ley.
Indicó el inversionista es el Gobierno Federal ya que es un proyecto marcado por la Presidencia como uno de los diez proyectos prioritarios de la nación y consideró aún es tiempo de llegar a acuerdos sin violentar ningún derecho ciudadano indígena.