Sin identificación alguna, cuatro varones que dicen trabajar para Teléfonos de México se presentan en domicilios particulares para preguntar si tienen el servicio que brinda esa empresa pues deben cambiar el cableado “por uno de cobre”, pero al momento de pedirles su identificación, se disculpan y se retiran.
Vestidos con ropa de civil, es decir sin al menos uniforme de la empresa, tocan a la puerta de las familias para “explicar” el motivo de su “visita”.
Sin incomodidad alguna, cuando se les pide identificación oficial de Telmex, se tocan el pecho “buscando” y se disculpan por no traerla y segundos después, se despiden para retirarse rápidamente.
Esto sucedió en la unidad habitacional Fidel Velázquez, donde muchos de sus habitantes trabajan durante el día y pocas personas permanecen en el domicilio, aunque la contingencia sanitaria por el Coronavirus ha cambiado esta situación temporalmente.