En el Décimo Batallón de Infantería fueron incinerados 530.91 kilos de clorhidrato de cocaína y 80.67 kilos de marihuana que han sido asegurados en los diversos operativos que realiza la Secretaría de la Defensa Nacional como parte de la Estrategia Nacional de prevención de adicciones.
La cocaína fue confiscada del último decomiso a la avioneta asegurada en el 2019 en Hopelchén, mientras que la marihuana ya se tenían en bodega.
En presencia del comandante de la 33 Zona Militar Enrique Dena Salgado y demás titulares de dependencias de seguridad estatal y federal se realizó la destrucción del narcótico.
Las autoridades navales resaltaron que con esta incineración se busca afectar la estructura de las organizaciones criminales al mismo tiempo que se contribuye al esfuerzo de las instituciones de seguridad para minimizar el trasiego de droga impidiendo que llegue a más ciudadanos sobre todo a los jóvenes.