Luego de señalar que el Sureste debe recuperar el reordenamiento territorial, pues hay puntos como Cancún en los que no hubo planeación alguna, y los beneficios solo se ven en la zona turística, dejando fuera al resto de la población, Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) y responsable del proyecto del Tren Maya, aseguró que éste es un proyecto para el desarrollo integral y busca la inclusión social pues se debe evitar que los ejidos sean desplazados.
Lo anterior durante un desayuno con representantes de los diferentes medios de comunicación en la ciudad, aseguró el Tren crea menos contaminación que una carretera y que habrá muchas obras secundarias de apoyo a los productores, además de que este proyecto ofrecerá distintas ofertas, pues no se trata solo de transportar visitantes, sino también tendrá servicio de carga.
Destacó en cuatro de las cinco entidades, la actividad agroalimentaria es fundamental para su desarrollo y este proyecto reduciría no solo costos, sino también tendría efectos positivos en el daño a las vías de comunicación como son las carreteras, que se deterioran aún más por el paso de camiones pesados, así como daños a la fauna pues es difícil evitar los animales silvestres crucen.
Afirmó se pondrá especial atención en este sentido con la construcción de pasos de fauna, instalación de sistemas con sensores auditivos para ahuyentar a las especies cuando se acerquen camiones cargados, además de reductores y muros que sirvan para evitar que el sonido y la vibración del paso del tren, afecte a especies diversas como es el murciélago.
Dijo también se busca crear nuevos conceptos de turismo, que sea más responsable social y ambientalmente, y, en el caso específico de Campeche, con más de 500 kilómetros de vías, será un factor importante para la actividad agropecuaria y lograr sea agroindustrial.
Más adelante, afirmó categórico no se expropiará superficie alguna, solo se comprará el derecho de vía en los puntos por donde el Tren pase por las localidades, y esto podría ser en un tramo de 30 a 40 kilómetros que es la parte más delgada de Calakmul.
Afirmó se pretende que en un plazo de 3.6 años, comience a operar el Tren Maya, es decir, en el 2023 y los resultados en materia de generación de empleos serán inmediatos desde el inicio de su construcción.
Finalmente, aseguró el sector empresarial en la entidad ha mostrado interés por sumarse al proyecto, con quienes han tenido algunas reuniones de trabajo.