Con dos votos en contra, de los diputados independiente Manuel Zavala y de la petista Ana María López Hernández, la LXI Legislatura del Congreso del Estado aprobó este medio día en lo general y en lo particular, los cuatro dictámenes de cuyas iniciativas todas en materia educativa, apenas dieran cuenta el martes pasado, en la sesión de la Diputación Permanente.
Los dictámenes de las cuatro iniciativas, todas enviadas al Poder Legislativo por el Jefe del Ejecutivo Estatal, contaron con 28 votos a favor, de los diputados de Acción Nacional, Revolucionario Institucional, Nueva Alianza y de la Revolución Democrática, aprobación que dio lugar a debate en la máxima tribuna, así como a sarcasmos, llamadas de atención de la mesa directiva y acusaciones de entreguismo y de corrupción.
Todo comenzó en la aprobación del segundo dictamen relativo a la iniciativa para reformar, adicionar y derogar diversas disposiciones de la Ley de Educación del Estado.
Con cuatro orados inicialmente, uno en contra –del PT- tres a favor –PAN, PRI y Panal-, finalmente fueron siete los que intervinieron en la máxima tribuna, donde por más de hora y media, cayeron en dimes y diretes.
Todo comenzó con la petista Ana María López Hernández, quien fijó su postura en contra quien aseguró que estas reformas o adecuaciones en materia educativa, buscan establecer mecanismos de control y presión sobre los verdaderos trabajadores de la educación, argumentando “un supuesto compromiso con la calidad educativa, pero violentando flagrantemente contratos colectivos de trabajo, prestaciones y seguridad laboral para los nuevos maestros del Sistema Educativo Nacional”, y acusó de sumisos a sus homólogos.
A favor lo hicieron la panista Yolanda Valladares Valle, quien indicó que el Congreso local tiene que sujetarse a las modificaciones que haya en las leyes federales. Agregó que “decir otra cosa es recurrir a la demagogia, entendida como palabras huecas que adulan el oído del pueblo, pero que no tiene sustento alguno”.
Señaló también que lo que se hace es un intento de contribuir a mejorar el sistema educativo nacional, no es la panacea y será el tiempo el que diga si funciona, y si no es así, volverá a cambiarse el marco normativo.
El segundo orador a favor, el priísta Jesús Quiñonez Loeza, en el mismo tono de su homologa panista.
Esto provocó que el diputado independiente, Manuel Zavala Salazar, visiblemente indignado, pidiera el uso de la palabra para señalar que el problema es que mientras los Congresos estatales y el de la Unión estén supeditados “a los poderes fácticos y al Poder Ejecutivo, las leyes las hacen como les viene en gana y las cumplen como les viene en gana”.
Esto le valió que el presidente de la Junta de Gobierno, Edgar Hernández, le reconviniera públicamente que se sujetara al tema de la ley de educación, llamado de atención que no sirvió de nada, pues agregó que dicha iniciativa y dictamen aprobado, no incluye nada de acabar con la corrupción en el magisterio, con la compra o venta de plazas, ni con el sindicato, con las cuotas sindicales y que pueda existir un gran proyecto educativo para el país.
No se fue limpio.
A partir de ahí, la reprimenda fue mayor. El primero fue el panista Javier Ortega Vila, quien dijo escuchaba “muchísima alharaca, muchísimo polvo, muchísimo ruido” y dijo no recordar que antes se haya hecho alguna reforma trascendental “como ésta” y que “no es casualidad que haya sido y se haya propuesto”.
Pero el que dio el remate en contra del diputado independiente Manuel Zavala, lo fue el panalista Mario Tun Santoyo, ex secretario general de la Sección IV del SNTE.
En clara alusión a Zavala Salazar , dijo que una ley no va a hablar de metas y objetivos, pues éstas están planteadas en el Plan Sectorial de Educación y añadió que la “incongruencia a lo mejor parte del desconocimiento del tema”.
Uno a uno rebatió sus argumentos. Indicó que hablar de paternalismo está fuera de la realidad.
-Les puedo asegurar que aquí no venimos a defender a nadie. Ningún gobierno, del partido que sea, aquí y en cualquier parte del mundo, va a ser capaz de dirigir un sistema educativo sin la participación de los padres de familia y lo calificó de utopía.
-Lo único que tenemos que hacer es legislar para que esa participación sea ordenada, organizada, justa y transparente. Ya no hay comisiones al SNTE, sino licencias sin goce de sueldo y esos sueldos los cubre el sindicato, con sus cuotas.
Zavala Salazar, desde su curul, pidió al presidente de la mesa directiva, Edgar Hernández, también reconviniera al panalista para que se sujetara al tema, quien también hizo caso omiso al señalamiento.
-Respecto a la corrupción, es un término muy amplio y se puede aplicar en diferentes niveles. Corrupto es el que viene a vender una idea que es falsa –arremetió.
-Ese es el corrupto. Si hablamos de corrupción en los partidos, en los sindicatos ¿de dónde sale tanto dinero para que un señor visite todo el país? ¿de dónde sale ese dinero?, cuestionó en clara alusión a la visita de Andrés Manuel López Obrador al Estado, a partir de la noche del miércoles.
En premio, recibió los aplausos de algunos diputados, del PRI, obviamente, y del público asistente, quien entendió a quien se refería.
Finalmente, dijo que es contradictorio que se pretenda que se vote en contra lo que los maestros están de acuerdo en que se realice y citó como ejemplo las propuestas que recibió la LXI Legislatura de los dirigentes sindicales del SNTE, Sitem entre otros.
El último en intervenir, el perredista Ismael Canul Canul dijo que su voto y el de su homóloga perredista, fue a favor porque “no se pone en riesgo el aspecto laboral de los maestros y que “el gobierno ejecutivo plantea claramente su obligación del mantenimiento de las escuelas”.
Finalmente dijo que “como PRD, consideramos es una ley necesaria y justa para la educación en Campeche”.
Sin más asuntos qué tratar, se clausuraron los trabajos de este tercer periodo extraordinario de sesiones del primer periodo de receso del segundo año de ejercicio constitucional.