Por ser hijos de policías de las diferentes corporaciones estatales, el gobernador Fernando Ortega Bernés entregó 420 becas y 119 bonos por mejor promedio escolar a igual número de menores, que comprenden un ejercicio financiero de poco más de 600 mil pesos, beneficio que por segundo año consecutivo se hace efectivo.
La entrega se realizó en uno de los salones del Centro de Convenciones Campeche XXI, en el que el mandatario campechano hizo apasionada defensa del trabajo que realizan los elementos de las diferentes corporaciones policiales, la responsabilidad que tienen y aunque reconoció que hay elementos que no cumplen con ella, metió las manos al fuego” por los más.
Afirmó que “la inmensa mayoría” de los policías, son elementos honestos y dignos y cuestionó que en los diversos medios de comunicación, por unos cuantos, se califique de manera negativa a toda la corporación, pues indicó que esto sólo lesiona a la población al crear un ambiente de desconfianza.
En compañía de los titulares de la Procuraduría de Justicia del Estado y de la Secretaría de Seguridad Pública, José Ambrosio Herrera y Jackson Villacís Rosado; Ortega Bernés se dirigió a los menores que recibieron una beca y/o estímulo económico para asegurarles que sus padres son personas de las que deben sentirse orgullosos.
Les dijo también que “lo malo, aunque no se vea, es lo primero que se sabe” y que “lo bueno, tarda mucho en reconocerse”, para luego destacar que sus padres tienen que pasar por controles de confianza más rigurosos y exigentes para que la corporación a la que pertenecen cuente con gente “con un verdadero sentido de compromiso”.
Cuestionó que en los diferentes medios de comunicación “se haya puesto de moda” hablar de la policía y sus elementos.
-Me lastima que acusen a toda la corporación por un elemento y eso es atentar contra la confianza ciudadana. La inmensa mayoría es gente de primera –puntualizó y es aquí donde afirma que “meto las manos al fuego” por la mayoría, “no por todos porque a veces hay malos y sinvergüenzas”.
Luego de narrar una anécdota en la que un ciudadano después de acusar a dos elementos de haberlo robado, se disculpa por mentir y acusar en falso y argumentó que lo hizo porque “está de moda acusarlos de ladrones”, pidió entonces a los comunicadores no caer en el abuso de descalificar a toda la corporación.