Tras una semana de sufrimiento y de constantes trabas burocráticas, este martes el Instituto Mexicano del Seguro Social por fin envió al menor Leonardo Alcocer Gómez, internado por un tumor cancerígeno en la cabeza, a la Unidad Médica de Alta Especialidad, de la ciudad de Mérida, Yucatán.
Lo anterior fue dado a conocer por los padres del menor, quienes desde temprana hora de este martes sostuvieron una reunión con directivos del hospital para explicarles el diagnóstico del menor y pedirles que dejen de causar alboroto en la opinión pública.
Y es que desde hace una semana, los padres de este menor iniciaron un calvario pues aunque los médicos del IMSS reconocieron que no tenían los especialistas, ni la tecnología para atenderlo, no habían autorizado el traslado del pequeño pese a que su vida dependía de ello.
“Al niño ya lo van a trasladar a Mérida, ahí lo van a valorar a ver si lo trasladan hasta México, es un tumor canceroso muy riesgoso que lo tiene en el tronco del cerebro, hay un 80 0 90 por ciento de muerte y un 10 por ciento de vida, pero vamos a llegar hasta el final”, dijo José Alcocer Ramírez, abuelo del menor tras su cita en la delegación del IMSS.
De acuerdo a la versión del Seguro Social, el menor no había sido trasladado a la Ciudad de Mérida debido a que era necesario estabilizarlo para evitar que su vida se pusiera en peligro.
“La verdad aquí llegas por las buenas y no te hacen caso. Pues como a ellos no les interesan porque no son sus familiares, uno si lo siente y empieza a meter presión y llegar hasta los medios para que te hagan caso”, dijo Edilberto Gómez, padre del menor.
Por su parte, el vocero del IMSS, justificó el retraso de una semana en el traslado del menor, asegurando que buscaban desinflamar el tumor y estabilizar las convulsiones epilépticas, sin embargo, se reservó el diagnóstico del pequeño.
“Es importante señalar que durante los días que se encontró ingresado recibió la atención médica adecuada a su padecimiento, esto por presentar una crisis convulsiva a consecuencia de un tumor. Como prioridad, para ser enviado a la ciudad de Mérida, Yuc., se tenía que controlar la crisis y proteger la vida del niño por las convulsiones que presentaba y evitar una lesión del sistema nervioso. Por esa razón no se había realizado su traslado”, concluyó.