Luego de que la sociedad condenara el desalojo de las huacaleritas del Mercado “Pedro Sainz de Baranda”, con el uso de la fuerza pública por parte de las autoridades municipales, hoy, el ayuntamiento de Campeche recula y autoriza la venta de productos a este sector en las puertas del centro de abasto.
Desde temprana hora, dos de las seis huacaleritas se mostraron contentas y satisfechas de los logros que su lucha les permitió, es decir, por tiempo indefinido y gracias a la antigüedad que poseen comercializando sus productos en el mercado principal, podrán permanecer en los accesos, pero sin instalar más “huacales” de los que necesitan para la venta.
“Estamos agradecidos, le queremos agradecer a Dios más que nada porque gracias a Dios tocó el corazón de ese hombre (Subdirector de mercados) e hizo ver las cosas justas. De hecho no se nos cobró multa, pero no teníamos por qué pagarla, dijo el licenciado Murillo que no sabía que se había usado la fuerza pública y nos dejó aquí en el lugar”, declaró María Luisa Pérez.
Señalaron que tras una serie de reuniones hasta altas horas de la noche del martes, entre las autoridades municipales y las 6 humildes mujeres que fueron desalojadas con lujo de violencia, acordaron mantenerse en el mismo lugar para vender sus productos.
“Le doy gracias a Dios porque la verdad volvimos a recuperar nuestros lugares. Estamos trabajando normal”, mencionó Yadira del Carmen Ordóñez Trejo, huacalerita que sufrió del regaño de los elementos del Grupo de Operaciones Especiales.
Detallaron que al revisar los expedientes y ubicarlas dentro del padrón de vendedores, se comprobó los años de antigüedad en estos espacios, por lo que a dos se les permitió su permanencia, mientras que las demás fueron reubicadas por tener menos de 1 año en esta actividad.
