Habrá “derbi madrileño” en la gran final de la Champions. Los “colchoneros” del Atlético de Madrid volverán a jugar una final de una Liga de Campeones de Europa, tal como ocurrió hace 40 años, y lo harán ni más ni menos que ante su archirrival, el Real Madrid, tras superar este miércoles en Stamford Bridge 3-1 al Chelsea de José Mourinho.
Tuvieron que pasar más de 120 minutos para que se abriera el cerrojo. Ambos equipos plantearon desde el duelo de ida -que terminó con empate sin goles- esquemas que lucían infranqueables para los delanteros. Pero en el minuto 35 los azules encontraron un resquicio para marcar.
El brasileño William desbordó por el sector derecho, y después de batallar con un par de defensores, el balón quedó suelto para que volviera a centrar César Azpilicueta. En el área, Fernando Torres lanzó un disparo con la pierna derecha, que superó al portero tras el desvió de un zaguero.
Stamford Bridge vibró con el gol.
Pero los Colchoneros no bajaron los brazos. En los primeros minutos del partido habían estado cerca de anotar, con un centro de Koke que pegó en el travesaño. Parecía que la suerte jugaba con los locales.
Pero en el minuto 43, cuando el entrenador Mourinho ya preparaba las indicaciones de vestidor para administrar la ventaja, Juanfran cruzó el balón desde el sector derecho del área de Chelsea. Ningún defensor azul logró interponerse, y Adrián López remató para igualar la serie.
Ese resultado tenía al Atlético de Madrid en la final. Y a los aficionados saboreando un “derbi madrileño” en la final de la Champions. En el segundo tiempo Chelsea se lanzó a buscar el gol que le diera el boleto a Lisboa. Samuel Eto’o ingresó de cambio, para impulsar a su ofensiva.
Sin embargo en el minuto 58 el delantero camerunés se ubicó en el sector defensivo, y en un intento por frenar a Diego Costa el árbitro marcó falta y penalti. El propio Costa anotó el 2-1 y definió la derrota para el equipo de Mourinho.
Todavía en el minuto 71 Arda Turán marcó un tanto más, después de una serie de rebotes. Fue la “puntilla” para los blues.
El Atlético tendrá que enfrentarse a una “bestia blanca” que quiere tener en la vitrina su décima orejona. En la Champions los merengues del Real Madrid vencieron de forma contundente al Bayern Munich, así que para muchos analistas son los favoritos para la final.
Pero el próximo 24 de mayo, cuando el balón ruede sobre el césped en Lisboa, nada estará definido.