Vecinos y comerciantes de la calle 59 del Centro Histórico piden se retiren las “cantinas al aire libre”, poniendo como ejemplo de disturbios, que este fin de semana jóvenes alcoholizados dañaron una de las esculturas que se encuentran en exhibición.
Karen Hidalgo, comerciante de prendas típicas dijo que “Las esculturas son algo que dan vista a los turistas y se deben de cuidar, todos deben tener más precaución de que si van a tomar no hagan destrozos, ya no sólo peligran las esculturas, también nuestros negocios”.
La molestia más sentida es de los vecinos del lugar, que además de lo que se publica en los medios de comunicación, aseguran estas acciones que calificaron vandálicas, son todos los fines de semana, donde jóvenes e incluso turistas tiran las macetas que se encuentran en el corredor y hacen sus necesidades en cada esquina, así lo manifestó Fernando Ulises Romero.
“El mayor problema es el alcoholismo que existe en las noches aquí y que los borrachos estén haciendo desorden, se orinan en la calle, tiran los maceteros, hay vigilantes pero se duermen y no hacen su trabajo”, señaló.
Aunque dijeron todos los desperfectos se dan por la falta de vigilancia, no abonaron a que se destine mayor número de policías para esta zona, pues dijeron es injusto destinar más recursos donde la única solución es retirar las cantinas del lugar.
“No lo quitan porque esto es negocio del Ayuntamiento, aún con la vigilancia si hay alcoholismo esto no se va a acabar… pero tampoco es la solución porque se va a estar destinando los recursos de los impuestos poniendo más vigilancia en una sola calle cuando hay colonias que carecen de vigilancia, la policía está hecha para todos”, comentaron.
Además señalaron que las esculturas corren el riesgo de ser dañadas por lo que argumentaron estarían mejor colocadas en una explanada donde estén más vigiladas y donde la gente las pueda apreciar sin tener que recorrer largas distancias.