De lo que hay que ver para creer, y es que en un hecho sin precedentes, militares en activo e incluso retirados han decidido convocar a una marcha a favor de sus compañeros detenidos por el caso Tlatlaya para el próximo 11 de Octubre en el zócalo capitalino.
La convocatoria realizada a través de Facebook y Twitter no es avalada por la Sedena por lo que todos los militares que decidan unirse al movimiento “#Yosoy26” se les podría, incluso, aplicar el Código de Justicia Militar por insubordinación.
Hasta el momento, la campaña es replicada por las familias de los militares, en la cual culpan de traición tanto al Presidente de la Republica, al comandante Supremo de las Fuerzas Armadas y al general Salvador Cienfuegos, secretario de la Defensa.
“La tropa está abandonada a su suerte por quienes se supone deberían protegerlos. Ahora nuestros soldados están indefensos, están abandonados y han sido catalogados como criminales que deben dejarse matar, se les prohíbe defenderse de los ataques bajo pena de degradación y cárcel”, señala la convocatoria.