Seguramente cuando Kim Kardashian decidió posar desnuda bañada en una especie de aceite, imaginó que sus seguidores “se derretirían” ante reveladoras imágenes, desafortunadamente ha pasado todo lo contrario, pues las burlas en la red solo hacen mención a sus fallidas fotos.
Para nadie es sorpresa que la curvilínea se sienta orgullosa de su trasero pero es que el tamaño de sus atributos ha sido calificado como exagerada y la pose elegida para estas imágenes en vez de sexy han sido señaladas como vulgares.
Tanto por su atrevimiento como por el tamaño y la forma de sus atributos, las redes sociales no tardaron en buscar similitudes con el físico exhibido. En la portada, aparece cubierta de aceite y sacándose un vestido negro, el mismo que luce en otra imagen.
En ese caso, aparece llenando una copa de champaña que sostiene con su trasero, emulando la versión que el fotógrafo Jean Paul Goude realizó previamente con otra modelo.
