Con un mil 875 hectáreas siniestradas, la Comisión Nacional Forestal cerró la temporada de quemas 2014, informó Antonio Álvarez Torres, subgerente de conservación y restauración de CONAFOR, tras señalar que la zona más afectada fue el municipio de Palizada.
En conferencia de prensa, el funcionario federal indicó que tan sólo en este año, la Conafor ejerció 7 millones de pesos en la temporada de quema, y de cinco incendios registrados únicamente se presentaron 3 denuncias ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Procuraduría General de la República, contra quienes resulten responsable por el delito de daños al ambiente.
“Estas 1875 hectáreas se cargaron más a lugares muy inaccesibles para nuestro personal y del Gobierno del Estado, fueron áreas forestales, pero el 95 por ciento fueron en pastizales y sabanas. Pensamos que es cacería furtiva, porque manejan la práctica de quema del pastizal para que haya rebrote de pastizal tierno y donde llegan los animales silvestres y ahí los puedan cazar”, dijo el subgerente.
Finalmente, señaló que el año pasado se registró la quema de más de 4 mil hectáreas, sin embargo, debido a la temporada de lluvias que inició antes, pudieron evitar el aumento de siniestro.