Luego del enfrentamiento armado que se suscitó hace unos días en La Ruana, donde perdieron la vida once personas, entre ellos el hijo del ex autodefensa, Hipólito Mora, este fue velado entre armas, encapuchados y un fuerte dispositivo de seguridad, para evitar más enfrentamientos.
La Ruana permanece al resguardo de Elementos del Ejército Mexicano, de la Gendarmería Nacional y de la Policía Federal.
En este sentido, la Comisión de Seguridad informó que el personal militar y policial, apoyado con vehículos blindados, arribó a la zona desde la tarde de ayer, para encargarse de la vigilancia y seguridad de la población, por lo que controlan los accesos y se realizan sobrevuelos periódicos.
Por su parte, los elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) lleva a cabo los peritajes correspondientes y recaban las declaraciones de los testigos en la localidad ciudad del municipio de Buenavista, Tomatlán.
El líder comunitario, Hipólito Mora, vela a su hijo Manuel, quien falleció durante el enfrentamiento, bajo un fuerte dispositivo de seguridad. Unas horas después de la muerte de su hijo Manolo, Hipólito Mora, comentó que siempre estuvo a su lado y que en una ocasión le pidió dejara la lucha pues temía que lo mataran.
“Unos federales le arrebataron cinco rifles a los muchachos míos, y sus pistolas, y les dijeron ahorita se los damos y ya no se los regresaron. No sé para qué se los hayan llevado. Y, sin embargo, “Al Americano” fueron a donde estaba, les ayudaron a subir heridos y la chingada. Les dejaron que se llevaran las camionetas, no detuvieron a nadie”, sostuvo Hipólito Mora en sus primeras declaraciones tras el enfrentamiento.