Ricardo Anaya señaló que su partido está puesto y dispuesto para encabezar el cambio de rumbo que México necesita y pide a gritos.
El legislador queretano definió como prioridades del blanquiazul detener el endeudamiento irresponsable de los gobernadores y dar la batalla para corregir la “tóxica reforma fiscal” que, según dijo, mantiene paralizada la economía del país.
También dijo que hay la disposición panista para debatir las iniciativas presidenciales en materia de seguridad y justicia, pero con respeto al federalismo y a la tradición municipalista.
Anaya urgió “un cambio de rumbo para devolverle a México la paz y la tranquilidad, un cambio de rumbo para limpiar la casa a partir del Sistema Nacional Anticorrupción, para devolverle a México la esperanza”.