México tiene uno de los ecosistemas de internet más abiertos del mundo y debe mantenerse así, sin olvidar que existen retos locales que se deben atender a la brevedad posible, como la brecha digital o los derechos que se respetan en la red, recomendó Manuel Haces, encargado de Prospectiva en NIC México, organización que administra los nombres de dominio en el país.
Unos 51.2 millones de personas que se conectan sin problemas para intercambiar información, crear contenidos y hacer uso de redes sociales o aplicaciones, lo que significa que la red es abierta e interoperable. Internet es uno solo en el mundo, pero hay países que están creando burbujas locales contrarias a los principios con los que se creó la red.
En China la red se encuentra controlada por el gobierno y esto afecta directamente a los usuarios.
De hecho, el gobierno chino acaba de reforzar su control sobre la web al presentar una serie de regulaciones y prohibir contenidos que desafíen al sistema político. Por ejemplo, censurará a quienes utilicen seudónimos como “Obama” o “Putin”, así como aquellos que hagan alusión a religiones, pornografía o menoscaben el régimen, por lo que los usuarios deberán registrarse con su nombre real.
México está viviendo la época ideal para establecer su propia agenda de gobernanza en la red, es decir, crear con la participación de la industria, la sociedad y el gobierno las normas que regirán la red. Lo anterior sin perder de vista las tendencias que marcan otros países como Estados Unidos u organizaciones internacionales y sobre todo los retos locales que deben vencerse.
En su opinión, el mayor reto del país todavía se encuentra en la brecha digital que existe porque más de la mitad de la población todavía no tiene acceso a navegar.
Datos de la Asociación Mexicana de Internet indican que sólo 51.2 millones de personas tienen acceso a la red, dejando excluidos a más de 60 millones de habitantes.