“El Estado debe implementar nuevas estrategias para garantizar el derecho a la vida de los ciudadanos, ya que las medidas de prevención del suicidio dejaron de funcionar y es importante retomar estos programas”, manifestó Ninive García Méndez, coordinadora de Proyectos en el Observatorio de Violencia en Campeche.
Aseguró que este problema social es algo que compete a todos los ciudadanos, por lo que las asociaciones civiles trabajan para tratar casos de depresión, sin embargo, indicó que a pesar del trabajo que se está llevando a cabo, es imposible para el observatorio llegar a todos los sectores de la población y es por eso que las instituciones estatales y municipales deberían concentrarse en este tema.
“La Secretaría de Salud debería trabajar en la detección de posibles trastornos suicidas pues la mayoría de los casos pueden evitarse con el tratamiento adecuado y hasta el momento las asociaciones civiles no cuentan con el suficiente presupuesto para canalizar todos los casos en el Estado”, enfatizó.
Señaló que es importante que empiecen a tomar importancia en los problemas sociales que aquejan a la ciudadanía pues en diversas partes de la ciudad existen problemas de violencia y drogadicción que se dejan a segundo término por parte de las autoridades y también son factores que podrían propiciar actos suicidas.