Habitantes de la comunidad de Ostula aseguraron que el pasado domingo, durante el desalojo en esa localidad michoacana, los militares dispararon contra la gente y no al aire, tal y como lo aseguraron las autoridades.
No fueron disparos al aire, ellos tiraron para que la gente se quitara, aseguró Agustín Vera Ramírez, representante de la comunidad de Ostula.
El mando especial de Seguridad para Michoacán, Felipe Gurrola, aseguró que los militares tuvieron que disparar, pero lo hicieron al aire, para que dejaran pasar el convoy en el que trasladaban al líder de las autodefensas Cemeí Verdía.
La muerte de un menor de 12 años que falleció durante el desalojo, Gurrola señaló que minutos después los mismos lugareños se escondieron entre la maleza, desde donde salió la bala que mató al niño.
El representante de Ostula, señaló que los elementos de la Policía Federal, Marina y la Policía Estatal arribaron con dos helicópteros a la comunidad destruyendo todo a su paso.
Al ingresar por los retenes que habían colocado los comuneros, dijo, las fuerzas federales y estatales dispararon y golpearon a la gente.
Asimismo, Agustín Vera Ramírez calificó la detención del líder de las autodefensas como una traición, pues el gobierno lo acusa de violación a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos cuando fueron las mismas autoridades quienes se las proporcionaron cuando se conformaron las Policías Rurales en ese estado.