En Oaxaca la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), perdió 310 puestos de mando medio y superior, entre ellos 11 direcciones y subdirecciones, con la transformación del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) anunciada por autoridades locales y federales.
Desde 1992, la CNTE se hacía cargo en el Instituto de la designación de jefes en los departamentos de educación inicial, misiones culturales, telesecundarias, secundarias generales, y formación de docentes. También de la designación de jefes de área en el ámbito de educación primaria e indígena.
Se enfatiza que 8 de cada 10 mandos medios eran impuestos por la Coordinadora, en un IEEPO que en 2015 tuvo un presupuesto de 17,778 millones 55,471 pesos.
Esto significa el 31% de todo el presupuesto educativo destinado a Oaxaca.
La elección de mandos en el IEEPO era por medio de una convocatoria emitida por la Coordinadora, que anunciaba las vacantes al interior del Instituto.
Sólo había aun detalle, los postulantes tenían que acreditar la asistencia a movilizaciones, mítines y plantones de la Coordinadora, además de demostrar sus años de servicio y su escolaridad, para poder participar en asambleas de la Sección 22 por sectores, región y, finalmente, a nivel estatal.
Pero a partir del decreto del 19 de julio pasado, se estableció una transformación del IEEPO y sus mecanismos de designación de mandos.
El documento firmado por el gobernador Cué establece que será facultad de la Junta Directiva del IEEPO el nombramiento de personal.
Otra característica es que con el IEEPO dominado por la CNTE no existían mecanismos “operativamente viables” para descontar o sancionar faltas de profesores que no acudieran a dar clases, por acudir a protestas o algún otro motivo. Así que cobraban de cualquier modo.
Con la reestructuración, dicen, sí habrá descuentos para faltistas y rescisión de contratos para quien incumpla su función.