La maestra Elba Esther Gordillo se desistió de las pruebas sobre su estado de salud a fin de que sea más rápido el procedimiento legal y la próxima semana el juez federal Alejandro Caballero Vértiz pueda resolver si le concede ese beneficio de la prisión domiciliaria a la maestra.
El penalista y defensor de Gordillo, Marco Antonio Del Toro, precisó que se desistió del análisis de las pruebas periciales porque estaban retrasando el trámite legal, y al final dichas probanzas no son parte de los requisitos que marca el artículo 55 del Código Penal Federal para que un procesado o sentenciado pueda acceder al beneficio de la prisión domiciliaria.
El artículo ordena que “cuando la orden de aprehensión se dicte en contra de una persona mayor de 70 años de edad, el juez podrá ordenar que la prisión preventiva se lleve a cabo en el domicilio del indiciado (…)”.
El abogado señala que adicionalmente metieron el tema de salud por tratados internacionales, pero no está contemplado en el artículo 55 del CPF.